domingo, 19 de febrero de 2023

Exposiscion Caravaggio y sus seguidores.

Con la exposición Caravaggio y sus seguidores, el Museo Nacional de Bellas Artes (MNBA) presenta un destacado conjunto de obras del pintor Michelangelo Merisi de Caravaggio (1571- 1610), uno de los más importantes representantes del barroco europeo, y un grupo de piezas de artistas de la época, directamente influenciados por su producción y su técnica, entre ellos Artemisia Gentileschi, Bartolomeo Cavarozzi, Giovanni Baglione, Hendrick van Somer y José de Ribera. Nunca antes se había realizado en América Latina una exposición de esa importancia dedicada a la obra del artista. La exposición se incluye en el marco de la conmemoración del cuarto centenario del fallecimiento del Caravaggio, que dio lugar desde el 2010 a exposiciones y debates en diferentes ciudades del mundo.

La muestra fue concebida por la doctora Rossella Vodret, una de las principales especialistas de Caravaggio en Italia, jefa de la Superintendencia Especial para el Patrimonio Histórico, Artístico y Etnoantropológico y de los Museos de la Ciudad de Roma, y fue curada por el Profesor Giorgio Leone. Se exhiben más de veinte obras procedentes de renombradas instituciones italianas y de colecciones privadas de Italia, Malta e Inglaterra. Algunas de las pinturas pertenecen a tres de los museos estatales más prestigiosos de Italia: Galleria Nazionale d’Arte Antica di Palazzo Barberini y Galleria Borghese (ambas de Roma), y la Galleria degli Uffizi (Florencia), además de otras instituciones romanas (Galleria Nazionale d’Arte Antica in Palazzo Corsini, Galeria Spada, Museo Diocesano Prenestino di Arte Sacra) y de Urbino (Galleria Nazionale delle Marche).

​Caravaggio nació en 1571, probablemente en Milán y se trasladó con su familia a Caravaggio en 1576, huyendo de la peste que asolaba su ciudad natal. Conocido como un artista “tenebrista”, cuyo estilo combinaba fondos negros con focos de luz intensa, fue probablemente uno de los artistas con mayor influencia en la historia de la pintura. Sus obras evidencian una existencia impetuosa y turbulenta, con escenas de tema religioso de marcada violencia y crueldad, en las que puede verse un enérgico contraste entre los fondos oscuros y los personajes bañados por una luz fuerte y dramática, principal característica de su producción. Estas pinturas también se definen por un marcado realismo en la representación de los personajes, sus vestimentas y los objetos que los rodean.

Formado en Milán y Roma, Caravaggio viajó luego a Nápoles, Malta, Siracusa, Messina y Palermo, escapando de un sitio a otro debido a su tumultuosa vida, y murió joven, en 1610, sin haber podido regresar a Roma. Estos viajes permitieron la difusión rápida de su pintura, y todavía en vida, su obra y la técnica que empleó sirvieron de inspiración para muchos de sus seguidores, los llamados Caravaggistas (que continuaron sumándose después de su muerte).

Sobre la elección de las obras del artista para esta exposición dice la doctora Vodret: “Para la muestra adoptamos una línea curatorial innovadora mostrando obras consagradas y conocidas del imaginario de Caravaggio, nuevos descubrimientos y lo que llamo cuadros problema –como concepto de la historia del arte- es decir, obras en estudio que estamos comparando con otros trabajos del artista por medio de investigaciones y publicaciones”.

El primer núcleo de la exposición está compuesto por las obras del gran maestro lombardo: San Jerónimo escribiendo (1605-1606), de la colección de la Galleria Borghese y San Francisco meditando (1606), del Palazzo Barberini. Asimismo a este bloque pertenecen Medusa Murtola (1597), de una colección particular, San Juan Bautista que alimenta al cordero, pintura del siglo XVII también de una colección privada, obras que se exponen por primera vez después probarse su autenticidad.

Además se exhibe el Retrato del cardenal (Benedetto Giustiniani), (1599-1600), de la Galleria degli Uffizi, pintura que, como la Medusa Murtola, es la primera vez que sale de Italia, y que pertenece a una época muy productiva del artista, en la logró un gran dominio de la técnica pictórica. El módulo se completa con San Genaro decapitado o Santo Agapito (c. 1610) (atribuida a Caravaggio) de la colección del Museo Diocesano, y San Francisco meditando (1606-1618), copia de autor, proveniente de una colección privada.

Caravaggistas

En los núcleos restantes podrán verse las obras de catorce artistas influenciados por Caravaggio, que adoptaron su técnica, recreándola o copiándola, conocidos como Caravaggistas. Estos pintores utilizaban el claroscuro de una manera particular, diferenciándose entre las distintas escuelas. “De los caravaggistas siempre digo que era un gran desventura para los artistas de la época vivir en el mismo período que un genio. Eran grandes pintores, pero cuando se los compara con un genio, todo queda oscurecido. Fue eso lo que ocurrió. Y es importante contextualizar para que el público comprenda la relación de los artistas de la época con Caravaggio”, explica Vodret.

La exposición cuenta con obras de: Artemisia Gentileschi (1593-1653), Bartolomeo Cavarozzi (1590-1625), Giovanni Baglione (1566-1643), Giovanni Battista Caracciolo (1578-1635), Hendrick van Somer (1615-1684/85), José de Ribera (1591-1652), Leonello Spada (1576-1622), Mattia Preti (1613-1699), Orazio Borgianni (1574-1616), Orazio Gentileschi (1563-1639), Orazio Riminaldi (1593-1630), Simon Vouet (1590-1649), Tommaso Salini (1575-1625) y Valentin de Boulogne (1591-1632).

Cuando Caravaggio abandonó Roma no dejó discípulos directos, pero había en la ciudad pintores que seguían su manera de trabajar, en particular el modo de iluminar las obras a partir de un foco de luz dirigido. Los primeros en advertir la impronta de Caravaggio y su nuevo estilo fueron algunos artistas de formación del tardomanieristas, como Giovanni Baglione, quien modificó en sentido caravaggesco su modo de pintar. Se presenta en esta ocasión Ecce homo (datada en 1606) proveniente de la Galleria Borghese. La adhesión al caravaggismo también se hizo notar en otros artistas, como Tommaso Salini, famoso en la época como pintor de naturalezas muertas, del que se exhibe Interior de cocina (El Mono y el gato) (1620-1625) de una colección particular de Londres.

Caravaggio consideró a Orazio Gentileschi el mayor de todos sus seguidores. Éste no se limitó a copiarlo sino que inventó una luz proveniente del exterior, con características propias. De Gentileschi, los visitantes podrán apreciar la obra Maria Magdalena, del siglo XVII, proveniente igualmente de una colección privada de Londres. De su hija, Artemisia Gentileschi, uno de los pocos ejemplos de artistas mujeres de la época (cuya vida estuvo signada por profundos conflictos), se presenta una pintura atribuida, Magdalena desvanecida, obra del siglo XVII proveniente del Palazzo Barberini, original elaboración de un desnudo con temática religiosa. Un caso excepcional en el que se identifica una síntesis personal es la producción de Orazio Borgianni, quien superpone algunos aspectos del nuevo lenguaje -en especial el uso de la luz- con los modelos formales y de composición vinculados con la tradición de finales del siglo XVI, como puede verse en su Autorretrato (1614-1615), de la colección del Palazzo Barberini.

La siguiente generación de caravaggistas está compuesta por pintores activos a partir de la segunda década del siglo XVII, formados bajo la influencia de Bartolomeo Manfredi, quien siguió el modelo de Caravaggio, sometiendo las figuras a nuevas composiciones. Entre ellos se cuentan Leonello Spada y el francés Simon Vouet. Se presenta del primero, Coronación de espinas (1614-1616) del Palazzo Barberini, y del segundo Herodías con la cabeza de Bautista, también del siglo XVI, una pieza de la colección del Palazzo Corsini. La evolución estilística de Vouet, y de otros pintores franceses y extranjeros presentes en Roma entre la segunda y tercera década del siglo XVII, fue decisiva para el destino del caravaggismo y colaboró a expandir rápidamente su fama por toda Europa. En ese sentido, también fueron importantes las producciones de Orazio Riminaldi y de Mattia Preti. Esto puede verse en dos obras: Sacrificio de Isaac (1925) de Riminaldi, proveniente del Palacio Barberini, y Negación de Pedro de Preti, pieza del siglo XVII también de esta colección. Este pintor es considerado el último intérprete de Caravaggio.

Otras pinturas del siglo XVII que se presentan en esta oportunidad son: Sagrada Familia con San Juan Bautista de Valentin de Boulogne (Galleria Spada) y Santiago el Mayor de José de Ribera (1631-1632) proveniente del Palazzo Barberini (ambos estaban entre los artistas que fueron a Roma a beber de la fuente caravaggesca), San Jerónimo (obra datada en 1652) de Hendrick van Somer, proveniente del Palazzo Barberini, y una obra anónima (copia de Caravaggio), Los trapaceros, de colección particular. De este modo, la exposición evidencia que cada artista, cargado de su cultura local, interpretó la técnica de Caravaggio, el gran artista del barroco italiano.

Por otra parte, las pinturas que se exhiben en esta ocasión acompañan a las de la propia colección del MNBA, que posee un importante grupo de piezas del barroco de Bartolomeo Cavarozzi, Luca Giordano, Francisco de Zurbarán, Peter Paul Rubens, Rembrandt Harmensz van Rijn, y José de Ribera entre otros. Asimismo la muestra forma parte de su programa de exhibiciones internacionales, con la presencia de la obra San Juan Evangelista del pintor Doménikos Theotokópoulos, El Greco (Candia, Creta, 1541 – Toledo, 1614), que se exhibe en la actualidad como parte del programa La obra invitada del Museo Nacional del Prado.

Caravaggio y sus seguidores, que se exhibió recientemente en el Museo de Arte de San Pablo (MASP), se acompaña de un completo catálogo con estudios académicos sobre el artista y su producción, con aportes en relación a las atribuciones, y la tarea de los especialistas italianos en conservación y restauración en las obras. Se completa asimismo con ensayos del Área de Investigación del MNBA.

Caravaggio. Obras Completas.

 http://www.caravaggio-foundation.org/

"San Ivo de la Sabiduria" Borromini.

Borromini. Iglesia San Carlos de Las Cuatro Fuentes 2.

Borromini. Iglesia San Carlos de Las Cuatro Fuentes 1.

Obras maestras del Renacimiento al Romanticismo. Colección del Museo de Bellas Artes-Galería Nacional de Hungría.

La muestra “Obras maestras del Renacimiento al Romanticismo”, es una selección de 58 piezas procedentes de la colección del Museo de Bellas Artes-Galería Nacional de Hungría. El Museo ofrece a sus visitantes esta exposición, que representa un hito en la historia del vínculo cultural entre Argentina y Hungría. Buenos Aires, junto con ciudades como Londres, París y Madrid, es la única sede en el continente americano que recibe la itinerancia de la colección húngara.
La exhibición cuenta con la curaduría de Ángel Navarro y Florencia Galesio, investigadores del Museo, y abarca desde el Renacimiento hasta el Romanticismo en el arte europeo, un extenso período ―entre los siglos XV y XIX― que permite apreciar el desarrollo de los movimientos artísticos centrales que dieron forma a la cultura moderna occidental.
El Renacimiento italiano está representado por los óleos de Lorenzo Lotto, Tiziano y Giorgio Vasari, y por una escultura de Leonardo da Vinci; mientras que, como parte del Renacimiento flamenco, se destaca el lienzo de Lucas Cranach Cristo y la Virgen intercediendo por los hombres ante Dios Padre, entre otras composiciones.
El Barroco, en sus variantes regionales, puede apreciarse en pinturas de Peter Paul Rubens, Anton van Dyck y Pieter Claesz, en el caso de Flandes y Holanda; de la mano de artistas italianos como Giovanni Battista Tiepolo y Guido Reni; y en los trabajos de los españoles Bartolomé Esteban Murillo y Francisco de Zurbarán. Este último grupo también incluye La Anunciación, del Greco, y Escena de la guerra por la independencia española, de Francisco de Goya.
Un conjunto de piezas de artistas húngaros de la talla de József Borsos, Mihály Kovács y Károly Brocky completan este corpus de obras escogidas que se exhibirán por primera vez en la Argentina.
Las obras del Museo de Bellas Artes-Galería Nacional de Hungría permiten ampliar el repertorio de nuestro Museo, formado inicialmente por piezas europeas de los siglos XVI y XVII, complementando la colección para ofrecer a los visitantes un interesante recorrido por las salas permanentes y el pabellón de exposiciones temporarias, que abarca un período significativo de la historia del arte occidental.
Obras maestras del Renacimiento al Romanticismo. Colección del Museo de Bellas Artes-Galería Nacional de Hungría podrá visitarse del 27 de marzo al 29 de julio, de martes a viernes, de 11 a 20, y los sábados y domingos, de 10 a 20, con entrada gratuita.
Sobre el Museo de Bellas Artes-Galería Nacional de Hungría:
Fundado a fines del siglo XIX, el Museo de Bellas Artes de Budapest alberga un importante patrimonio de perfil internacional de pintura antigua y moderna, papel y escultura. En tanto, la Galería Nacional de Hungría, dedicada exclusivamente al arte del país, se estableció en 1957 de forma oficial como museo nacional. Desde 1975, tiene su sede en el complejo del Palacio Real de Buda, donde se exhiben grandes obras de arte, del medioevo al siglo XX.
En 2012, ambas colecciones se unificaron, y se creó el Museo de Bellas Artes-Galería Nacional de Hungría, la institución más grande de ese país, con un acervo que abarca desde el arte egipcio hasta el contemporáneo. Esta nueva estructura institucional demandó una renovación de la sede del Museo de Bellas Artes y, desde su cierre por reformas, parte de su colección comenzó a itinerar por instituciones de otros países: el Palazzo Reale, de Milán; el Museo de Luxemburgo, de París; y el Museo Thyssen-Bornemisza, de Madrid. En 2018, finaliza su recorrido en Buenos Aires, para regresar en septiembre a Budapest, donde ocupará su lugar en la nueva exhibición permanente del Museo.
El catálogo de la exposición:

Colección Barroco MNBA

 https://www.bellasartes.gob.ar/coleccion/buscar/?estilo=3#resultados

Colección Manierismo MNBA

 https://www.bellasartes.gob.ar/coleccion/buscar/?estilo=12

Colección Renacimiento y Pintura Flamenca MNBA

 https://www.bellasartes.gob.ar/coleccion/buscar/?estilo=13

sábado, 18 de febrero de 2023

Obras comentadas: Autorretrato, Alberto Durero, 1498.

Durero y Cranach. El Renacimiento Alemán.

Miguel Angel.

 La Capilla de los Medicis.

"Las Capillas de los Medici forman parte del complejo que incluye la Basílica de San Lorenzo y que alberga las tumbas de 50 miembros de la familia de Medici. En el interior de las Capillas de los Medici encontramos la Sacristía Nueva de Miguel Ángel, y la Capilla de los Príncipes de Buontalenti.
 La construcción de la Sacristía Nueva comenzó en 1521 y fue diseñada por Miguel Ángel bajo pedido de los papas Medici, Leone X y Clemente VII. Cuando los Medici fueron expulsados de Florencia en 1527, las obras se interrumpieron hasta 1531 cuando Miguel Ángel retomó la tarea que debió suspender nuevamente en 1534, cuando tuvo que partir para trabajar en la cúpula de la Basílica de San Pedro y en la Capilla Sixtina en Roma. Por esta razón, las obras fueron terminadas sucesivamente por Giorgio Vasari y Bartolomeo Ammanati.
La Capilla de los Príncipes es la capilla más lujosa de la familia de Medici, su decoración continuó hasta el siglo XVIII cuando fue sepultado allí el último de los Medici. Aquí fueron sepultados también los miembros de la familia con título de Grandes Duques de Toscana. En los seis sarcófagos descansan los restos de Fernando II, Cosimo II, Fernando I, Cosimo I, Francisco I, Cosimo III, y sus respectivas esposas.
Qué son hoy las Capillas de los Medici?
Las Capillas Mediceas fueron construidas en el siglo XVII como mausoleo para los miembros de la familia Medici, hoy en día es un museo estatal de Florencia que incluye la Nueva Sacristía datada en el siglo XVI. La Nueva Sacristía es la gran evidencia de la genialidad de Miguel Ángel, une una arquitectura dinámica y una escultura notable. La planta cuadrada cubierta por una media cúpula, claramente fue inspirada en la Vieja Sacristía diseñada por Brunelleschi. La absoluta pureza de las estatuas en mármol blanco y la decoración geométrica en piedra gris interrumpen y evidencian el muro contrastando con la explosión de color de la Capilla del Príncipe, decorada con la técnica del mosaico de piedras semi-preciosas.
Curiosidades de las Capillas de los Medici
Sabías que Miguel Ángel realizó para la Capilla de los Medici una Virgen con el Niño (la Madonna Medici) donde podemos apreciar las inclinaciones religiosas del artista, según las cuales, cuando las glorias terrenas pasan sólo la espiritualidad y la religión permanecen para aliviar las inquietudes de los hombres. A los lados de la Virgen están presentes los dos santos protectores de la familia Medici, Cosimo a la derecha realizado por Montorsoli en 1537 y Damián a izquierda realizado por Raffaelo da Montelupo en 1531.
Conocer más claramente la historia de una ciudad, de una familia y de un artista.
En las Capillas de los Medici, ubicadas detrás de la basílica de San Lorenzo, podemos ver la majestuosidad de la obra de Miguel Ángel. Junto a sus esculturas y decoraciones arquitectónicas, este museo muestra también el Tesoro de la Basílica de San Lorenzo en sus relicarios y objetos litúrgicos, reconocidos como ejemplos de la orfebrería del Renacimiento y Barroco.